Talante a golpe de misil

Para que a los marroquís no se les ocurra volverse a subir a las piedras de Perejil. O para que a algín biznieto de Napoléon no se le pase por la cabeza cruzar los Pirineos desde Sant Jean de Pied de Port como hizo el "petit cabrón" que llama Pérez Reverte.

Para eso nos compramos 2600 misiles anticarro de origen israelí. Se hacen llamar Spike y son mucho mejores que sus hermanos americano y europeo. Estos se llaman Hellfire y Trigat. Y es que los Spike deben ser "la polla". Te permiten pegarle un leñazo a un tanque a 4 kilómetros de distancia. Me imagino que el que lleve el Spike este se debe sentir súper macho.

No hay dinero para abrir la biblioteca de Burlada, lugar donde vivo, los domingos, pero da igual. Hay un tipo que siempre duerme en la puerta de Jesuitas pero tampoco importa. Un pobre más. Lo primero es la seguridad. Y me siento mucho más protegido sabiendo que si a un "franchute" se le ocurre poner sus chauvinistas pies en Luzaide le vamos a meter un Spike por el culo.

Eso sí, con talante. No se vayan a pensar Villepin y Chirac que nosotros somos como el presidente de los EUA o el dictador de Corea del Norte. Siempre con talante.


Jau, a las 12:03 horas del sábado, 25 de noviembre de 2006. Escuchando "Mishaela" de Noa.