Me ha llegado un correo electrónico que no acabo de entender. Me dice que actúe para desterrar de los planes de estudio Educación para la Ciudadanía. En ese correo viene un enlace a una web de la que veo se ha extraído el texto que acabo de leer. Entro en
http://www.epcno.org/ y leo todos los apartados. En ninguno de ellos podemos leer el pliego de Objetivos de la asignatura. Pero de la lectura de esta web deducimos que nuestros jóvenes van a salir convertidos en diablillos.
Más. En la web queda muy bien eso de "infórmate de los detalles de EpC". Entrando al enlace tenemos un retahíla de enlaces a otras páginas con críticas a la asignatura y cómo objetar a ella. Información de la docencia, ..., cero o muy poco.
Rastreo en internet. Y poniendo en Google "objetivos educación para la ciudadanía" encuentro en primer lugar un documento en PDF de 9 páginas de la Junta de Andalucía con los objetivos y contenidos de la asignatura a través del último ciclo de primaria y toda la secundaria. Me lo leo (la letra es grande). Y no veo diablillos, es más, me da la sensación de que he impartido Educación para la Ciudadanía a mis críos cuando he estado de monitor con ellos durante muchos años.
Llego a la parte en la que se habla de democracia. Joder, ¿os imagináis qué sería votar al Senado sabiendo lo qué es? Medio ambiente. Chavales que desde pequeños van a saber que el bus es barato y ecológico, y que el aceite usado no se echa por la fregadera. Educación vial. Gente a la que se le va a inculcar el respeto de las normas de tráfico tanto al volante como a pie. Si desde pequeño me hubiesen enseñado algunas cosas de estas quizá no me habría caído de la moto ni habría dado tres vueltas con el coche. No sé. Sexualidad. Tema tabú. Chhssssssss. De eso no se habla, ¿no? Como si el ser humano no fuese sexuado. Claro.
Y lo que me molesta es que esta campaña está alentada por la Iglesia. Esa institución a la que yo, José Mª Jaurrieta Zarranz, pertenezco, de la que participo y con la que colaboro. Esa que, en ocasiones, desacredita a los que, sintiéndose miembros de ella no siguen el camino oficial por discrepar, más que en el fondo, en las formas. Sí, voy a misa los domingos. Y cuando lo digo la gente se extraña. Normal.
Bueno, nada más. Espero que nadie se moleste con este correo pero una cosa es criticar como se debe y otra hacerlo sin argumentos. Porque otra de los objetivos de esta asignatura es crear personas críticas, no criticonas.
Jau, a las 12:15 horas del lunes, 1 de octubre de 2007.